Malísimo profesional si se puede llamar profesional. Para el montaje de una encimera de cocina de silestone, se le olvidó el color, mejor dicho no lo apuntó, menos mal que se lo recordé. Se equivocó en la medida y tuvo que volver, no me extraña pues la midió en nada de tiempo, rapidísimo. El presupuesto lo subió alegando que cuando fué medía más, claro porque volvío a hacer los 40 km de distancia de ida y vuelta. Además me dice que no tiene culpa de que el suelo, techo y esquinas estén desnivelado (desnivel que apenas hay, comprobado) y le contesté que está haciendo un trabajo de terminación y los muebles se puede nivelar por la patas que tienen, que me da igual si hay desnivel o no que está haciendo un trabajo de terminación pero sus inseguridades es por lo que me lo decía. Y para colmo el agua al lado del escurridor de la encimera, el agua se va al lado contrario del fregadero. De esto último no se responsabiliza, alega que estaba todo a nivel que lo muebles se han desnivelado no me extraña a la velocidad de montaje de la cocina y de medición, fué rapidísimo de forma alocada. Después de todo no es barato, cualquiera lo hubiera montado mejor incluso yo.
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